Saint-Malo: cuna del célebre escritor Chateaubriand y antigua base de corsarios, Saint-Malo es una deslumbrante localidad costera famosa por su ciudad amurallada y sus increíbles vistas. Pasea por sus murallas para disfrutar del paisaje de la costa y las islas cercanas. Cuando la marea está baja, puedes explorar su rica historia marítima y sus fuertes históricos, como el Fort National y el Petit Bé. Disfruta del marisco fresco y déjate envolver por la energía del lugar. No dejes de visitar la catedral de Saint-Malo, una obra maestra de la arquitectura gótica.
Mûr-de-Bretagne Guerlédan: a orillas del impresionante lago Guerlédan, esta ciudad ofrece un entorno inigualable para practicar actividades al aire libre, como senderismo o ciclismo. El lago es ideal para deportes acuáticos como el kayak o el paddle surf. Explora los bosques de los alrededores y disfruta de un pícnic junto al lago mientras te dejas llevar por la tranquilidad de este pintoresco lugar.
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