Me arrepiento de no haber arrancado antes, pero es fácil decirlo a todo pasado. En todo caso, yo he creído que podía ganar. Sin embargo, la subida final no era lo suficientemente dura para mis características; especialmente en los últimos tres kilómetros, donde había un falso llano que me ha obligado a poner el plato grande y ha roto mi ritmo. Ha sido en esos tramos en los que Jungels ha demostrado más fuerza que yo; más todavía después de toda la energía que yo había gastado para recortarle dos minutos justo antes.
Pese a todo, esta actuación sirve para refrendar mis buenas sensaciones. Me falta todavía un poco de gas. Lo de hoy es un buen signo porque muestra que mejoro poco a poco, y en la segunda y tercera semana vendrán etapas que me irán mejor todavía.