Hasta la más plana de las jornadas está perlada de sorpresas en este Tour de Francia. La etapa de Toulouse, inmediatamente posterior al día de descanso, prometía una intensa pelea por la escapada y la victoria parcial, y estuvo a la altura: la fuga tardó horas en fraguar, y Jonas Abrahamsen se impuso en meta tras rodar en cabeza desde el primer hasta el último metro para estrenar al conjunto Uno-X en la Grande Boucle, batiendo en el último golpe de riñón a Mauro Schmid (Jayco-AlUla) y manteniendo a raya a Mathieu Van der Poel (Alpecin-Deceuninck), quien les perseguía desbocado. Lo que no anticipamos era la pelea por la general, con Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike) atacando en el plano y en las cotas y Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) defendiéndose cual gato panza arriba. Esta línea argumental, por desgracia, se truncó con una dura caída del esloveno a 6 kilómetros del final que, pese a no impedirle llegar a meta en aparente buen estado, impuso una tregua que a buen seguro se romperá este jueves en Hautacam, estreno de los Pirineos en este emocionante Tour de Francia que continúa liderado por Ben Healy (EF Education-EasyPost).
172 corredores tomaron la salida en la undécima etapa de la edición número 112 del Tour de Francia a las 13:50 para afrontar una travesía de 156,8 kilómetros con salida y meta en Toulouse: una jornada llana como un plato pero salpimentada con una serie de cotas y repechos en la parte final para dificultar una hipotética llegada masiva. No obstante la sazón del recorrido, fueron los ciclistas quienes le pusieron el picante. Jonas Abrahamsen (Uno-X), Davide Ballerini (XDS-Astana) y Mauro Schmid (Jayco-AlUla) arrancaron con el mismo banderazo de salida y hubieron de rodar a 51,7 km/h durante la primera hora de carrera, en la cual el noruego franqueó primero la Côte de Castelnau d’Estrétefonds (4ª, km 25,9), para mantener a raya a un pelotón en llamas donde se sucedían ataques, contraataques y cortes de envergadura.
Ataque de Vingegaard… en una jornada llana
Sería en el kilómetro 74 que Fred Wright (Bahrain Victorious) y Mathieu Burgaudeau (TotalEnergies) empalmarían con Abrahamsen, Ballerini y Schmid para formar un quinteto en cabeza de carrera. No obstante, todavía quedaban ganas de batalla atrás: hasta el maillot amarillo Ben Healy (EF Education-EasyPost) y Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike) atacaron en un momento dado, obligando a reaccionar a Tadej Pogacar (UAE Team Emirates), Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step) y el resto de hombres de la general. Fruto de ello, en el kilómetro 90 se marcharían Wout van Aert (Visma-Lease a Bike), Mathieu Van der Poel (Alpecin-Deceuninck), Arnaud de Lie (Lotto), Quinn Simmons (Lidl-Trek) y Axel Laurance (Ineos Grenadiers) en busca de la cabeza de carrera.
Pulso entre la fuga y sus perseguidores
Al paso por Labastide-Beauvoir (SI, km 97,3), encabezado por Abrahamsen, la escapada disfrutaba de 50” de ventaja sobre el grupo perseguidor; 1’20” sobre un Nelson Oliveira (Movistar Team) que posteriormente desistiría de su caza en solitario; y 2’30” sobre el pelotón, donde Israel-Premier Tech se fajaba tratando de continuar concursando por la victoria de etapa. Wright pasaría el primero por la Côte de Montgiscard (4ª, km 111,6) y la Côte de Corronsac (4ª, km 117), donde Van der Poel y compañía coronaron a sólo 25” de cabeza de carrera.
Dura caída de Tadej Pogacar
Fue en la Côte de Vieille-Toulouse (4ª, km 142,5) que Schmid y Abrahamsen aceleraron para marcharse en busca del triunfo, coronando con 15” sobre un grupo perseguidor que especulaba, inseguro. Van der Poel trató de reaccionar en la Côte de Pech David (3ª, km 148), pero apenas pudo acercarse al dúo de rodadores que, comprometido en los relevos, logró llegar al último kilómetro con tiempo de medirse y jugarse los cuartos, cayendo la victoria en manos de Abrahamsen. En el pelotón, Kévin Vauquelin (Arkéa-B&B Hotels) primero y los Visma-Lease a Bike después atacaron para generar un caos que dejó a sólo 15 hombres en el grupo del maillot amarillo. La intensa batalla cesó a 6 kilómetros de meta, cuando Pogacar hizo el afilador con Tobias Johannessen (Uno-X) y se fue al suelo como consecuencia. La conmoción dictó una tregua que propició un reagrupamiento cara a meta.