Estoy muy agradecido a mis compañeros porque me han llevado en cabeza durante los 30 últimos kilómetros. En la parte final me esperaba un recorrido más sencillo, pero era un sube y baja constante. Es por esto que he decidido esperar a que alguien lanzara el sprint antes que yo. Démare ha abierto fuego junto a Degenkolb y he logrado rebasarles. Tenía un poco de miedo porque no sabía si sería capaz de mantener a raya a Colbrelli. Por fortuna, lo he conseguido.
Estoy muy contento de llevar el maillot amarillo. Intentaremos mantenerlo en la CRE.
Estoy especialmente contento porque hoy han venido a verme muchos amigos de Zilina, incluyendo a mi padre. Es bonito triunfar delante de ellos. Esta victoria es también para mi hijo Marlon.