El día empezó bastante mal. Richie tuvo que abandonar por una caída y tuvimos que redefinir la estrategia del equipo sobre la marcha. Porque la carrera sigue, y teníamos que marcarnos nuevos objetivos tan pronto como fuera posible.
Debería de haber guardado un poco más en los relevos para ganar la etapa, pero claro: es algo fácil de decir a todo pasado. Tenía confianza en mi sprint, y quizá lo empecé demasiado tarde. El objetivo principal de hoy era ganar la etapa, pero bueno: unas veces se gana y otras se pierde.
Estoy contento del papel del equipo en esta primera semana. Lo estaría todavía más si Richie todavía siguiera en carrera. A partir del martes, tendremos más libertad de movimientos. Quizá me meta en la fuga con el maillot amarillo.