Quise coger segundos en el Point Bonus para reforzar mi posición en la general. Por lo demás, ha sido una etapa fácil pero en la que no he podido desconcentrarme en ningún momento por la amenaza del viento. Estoy contento de mantener el maillot amarillo: quiero vestirlo antes y después de Roubaix.
El Tour de Francia todavía es muy largo, pueden pasar muchas cosas. En una etapa como esta intentamos no gastar demasiada energía. Quizá con un viento más intenso hubiera sido diferente.